Es muy importante para la organización de nuestro trabajo mantener el escritorio lo más ordenado posible.
Alguna vez nos ha pasado que mientras estamos trabajando necesitamos un bolígrafo, una grapadora, algún documento y no lo encontramos porque no podemos ver la parte de arriba de nuestro escritorio debido al gran desorden que hay.
A continuación os doy algunos consejos para tenerlo ordenado y no ponernos histéricos porque no encontramos las cosas :):
1 – Limpia tu escritorio a fondo y déjalo libre de cualquier cosa. Ponlo todo en el suelo o en una mesa cercana. Tira a la basura las cosas que no sean necesarias, como papeles viejos, trozos de papel con anotaciones inservibles, bolígrafos que no tienen tinta, alguna grapadora rota…
2- Antes de poner nada en el escritorio, tenemos que decidir cuáles de nuestras pertenencias son los más utilizados. Cuantos menos utensilios guardes en tu mesa de trabajo, más fácil y cómodo será todo. No es necesario tener 20 bolígrafos o 200 lápices… Piensa sólo en lo realmente necesario para el trabajo diario. Según que material (tijeras, documentos, etc) se pueden guardar en un cajón de fácil acceso.
3- Coloca primero los objetos utilizados con mayor frecuencia (teléfono, ordenador). Recuerda que el ordenador de sobremesa, (el cual no vas a estar moviendo de un lado para otro) conviene pensar bien cómo y dónde lo vas a poner, ya que si vas a pasar mucho tiempo delante de él debes pensar muy bien dónde lo ubicas para que te sea lo más cómodo posible. La pantalla cuando más lejos de tus ojos mejor. Los cables debes recogerlos al máximo y si evitas que se vean, mucho mejor. Las impresoras suelen ser algo molestas, si puedes colócala en una mesa auxiliar, ya que suelen quitar espacio.
4- Si tienes una cajonera, usa el primer cajón para los utensilios que más utilices, así estarán localizados y a mano. Los utensilios que menos utilizas los puedes poner en el último cajón o al fondo de alguno de ellos, dejando delante lo que más usas. 
Si tienes alguna duda sobre algún utensilio, puedes preguntarte: ¿realmente uso esto a menudo? ¿Es indispensable que lo tenga fuera del cajón?
5- Es importante, que al final de cada jornada, dejes tu espacio de trabajo como lo tenías al empezar. Aunque parezca increíble es sólo cuestión de unos pocos minutos dejar todo guardado y todo ordenado. Seguro que al día siguiente el comienzo será mucho más llevadero… Es aconsejable tener una agenda o un bloc de notas donde apuntarte las tareas pendientes para el día siguiente, siempre ordenándolas por la tarea más
6- Desarrolla un sistema con archivadores para la documentación, así sabrás lo que está por tramitar y lo que ya está tramitado.
Comentaros que estos consejos son bastante generalizados y de modo orientativo, ya que cada persona es un mundo y cada trabajo es diferente.
Si tienes alguna duda sobre algún utensilio, puedes preguntarte: ¿realmente uso esto a menudo? ¿Es indispensable que lo tenga fuera del cajón?.
Al fin y al cabo, en esto de la organización todo es cuestión de hábitos, lo único que debes hacer es mantener los buenos y deshacerte de los malos.
¿Y tú? ¿Cómo tienes tu espacio de trabajo?
