historia de los sobres de papel

Un invento muy valioso. Conoce la historia de los sobres de papel

Con el pasar del tiempo, hay elementos de la vida cotidiana que han pasado a mejor vida, pero que en algún momento, desde que el mundo es mundo, fueron de gran importancia y sirvieron para darle un giro de 180 grados a la historia de la humanidad.

En esta oportunidad te hablaremos del popular sobre de papel. Enveloppe, envelope, envoltorio, sobrescrito, o como prefieras llamarlo, este valioso artículo, ha servido desde hace mucho tiempo atrás, incluso más del que pudieras imaginarte, para transportar mensajes de amores escondidos, correspondidos o tal vez prohibidos, pero también han llevado consigo información confidencial que nadie en todo el mundo podía saber y que podrían ser determinantes para cambiar el curso de toda la tierra.

Si retrocedemos unos 4000 años en nuestra historia, nos encontraremos con que el primer sobre que existió fue nada más y nada menos de que barro, pero ¿De barro de verdad? Pues sí, y esto ocurrió cuando los babilonios cubrían con lodo cocido los mensajes que enviaban, y de esta manera las cartas oficiales fueran inviolables y la información que se transportaba quedara bajo la mayor de las confidencialidades.

Estas especies de sobres eran básicamente unos jarrones hechos con tierra mojada, lo que hacía que fuera casi imposible ver la información que se estaba llevando, a menos, claro, que esta fuese reventada por algún curioso antes de llegar a su destino, pero con el pasar del tiempo, estos peculiares personajes se las ingeniaron para crear un método más práctico y reutilizable. Por ello, más adelante, crearon un paquete que cumplía la misma función pero era hecho con las fibras de plantas que ya estaban secas y que podían utilizarlo más de un par de veces sin la necesidad de destruirlo.

Del barro al papel

Ahora, vamos a viajar desde la antigua Babilonia a la Francia real del siglo XVII, en donde un hombre conocido como Antoine De Courtin, tuvo una idea genial y decidió probarla. El hombre en cuestión, colocó una hoja de papel bastante delgada sobre la información que enviaba a los reyes del país. Aquí podía personalizar el mensaje, colocando de quien y para quien iba dirigida la carta y a su vez mantenía la confidencialidad de lo que se quería decir.

Esta invención del hombre se convirtió en el boom del siglo XVIII y en menos de lo que cantó un gallo, la idea se expandió por todo lo largo y ancho del continente europeo, siendo mayormente utilizado por las familias de la alta alcurnia.

Gracias a ello, muchas familias de esta época adoptaron escudos o símbolos que los representaban y servían como una identificación, y a su vez, con el pasar del tiempo, estas obtenían un lugar importante dentro de la sociedad de los países de toda Europa.

Con el pasar del tiempo, se empezaron a emplear otros elementos que complementaban la información que iba en el sobre, como por ejemplos el uso de colores en los sellos, fuentes tipográficas distintas, escudos, simbología significativa, sobres de distintos materiales y entre otras cosas.

Este artículo se convirtió en algo tan importante, que por más de dos siglos el uso de sobres, fue el método más importante utilizado para el envío de información en toda la historia de la humanidad.

Pero no todo es color de rosa, pues desde que el internet apareció en la vida de los seres humanos, el mundo entro ha estado en constante evolución, desplazando el uso de los famosos sobres y dándole paso triunfal al envío de correspondencia, pero a través del muy utilizado correo electrónico o por sistemas de mensajería instantánea.

Pero independientemente de todo esto, el uso del sobre es muy importante, ya que en muchas partes del mundo todavía existen personas que hacen uso de este convencional método para enviar cualquier tipo de información personal, oficial o comercial.

Actualmente existe una gran cantidad de sobres; sobres blancos, grandes, medianos, pequeños, de colores diversos y de distintos tipos de papel, como pueden ser los sobres kraft, o los sobres especiales que van acolchados o específicos para cds o dvd, estos sobres estas diseñados para poder complacer los gustos de cualquier tipo de comprador a nivel mundial.

Según su tamaño podrás encontrar sobres de distintas dimensiones, pero este siempre va a depender del tamaño del papel que se utilice para introducir en el sobre. Los más utilizados son las fundas para correspondencia personal, oficial o comercial cuyas medidas van a depender del modelo. Las más conocidas son las fundas grandes cuyas medidas son 10×24 cm y las pequeñas que miden 9×16 cm.

A pesar de ser las dimensiones más conocidas y adquiridas comercialmente, también existen sobres tamaño oficio, carta, extra oficio y folio. Por otro lado están los semicuadrados cuyas medidas son casi las mismas por todos sus lados y los sobres rectangulares, que se diferencian de los anteriores por ser más anchos en su base y más cortos de altura.

A parte de sus dimensiones, los sobres también tienen otro tipo de clasificación, y es que estas fundas tienen otras características que los diferencian unos de otros. Por ejemplo, existen los sobres que se distinguen por su sistema de cierre, como los engomados, en los que hay que humedecer la solapa para poder sellarlos y están los autoadhesivos, que contienen en la pestaña una cinta plástica que al ser desprendida tiene pega y cierra el sobre sin ningún problema.

Por otro lado podemos conseguir las fundas que se diferencian según su diseño, en donde encontraremos los sobres con ventana, que poseen una abertura cubierta con un plástico transparente y se puede apreciar en uno de los ángulos del sobre, sea el derecho o izquierdo, en su parte inferior, en donde se puede observar información importante relacionada con su destinatario como su nombre o dirección, y están las fundas sin ventanas que están hechos completamente de papel o del material en el que están confeccionadas sin ninguna abertura en toda su estructura.

En cuanto al papel, te podemos decir que hay una variedad inmensa de sobres, que están hechos para complacer todos los gustos. Estos varían desde el grosor de la hoja con la que están confeccionados hasta la textura y el color, para que así los compradores puedan escoger cuál es su favorito para enviar correspondencia.

Los más conocidos son los sobres de papel blanco y los sobres kraft, también conocidos como sobres tipo manila o de papel color marrón.

Los sobres de papel blanco, son sencillamente fundas hechas con hojas de este color, y sirven principalmente para realizar el envío de correspondencia por diversos motivos, ya sea una carta de felicitación, invitación, buenos deseos u otro asunto o por lo contrario, algún documento de suma importancia.

Si retrocedemos otra vez en la historia, podremos conocer que el papel existe desde hace mucho tiempo, cuando los egipcios empleaban el papiro para hacer sus escrituras, pero los chinos son los más importantes en todo este asunto, pues ellos son considerados los pioneros en la fabricación de papel, cuando hicieron la primera hoja utilizando una pasta vegetal sacada de la fibra de la caña de bambú.

Ahora bien, otra alternativa son los sobres kraft, también conocidos como sobres manila, que son fundas fabricadas con un papel de color marrón. Su textura es más gruesa y resistente que la del papel convencional, lo que hace que este tipo de sobre, sea el preferido a la hora de ser adquiridos.

Este es un material muy versátil, se adapta muy fácil a cualquier espacio y mantiene lo que lleva en su interior en perfecto estado. Estos, al igual que los de papel blanco, se pueden conseguir de distintos tamaños y con formas que los distinguen unos de otros.

Pero si lo que estás buscando es algo más original, también existen sobres fabricados con papel de diversos colores y con otras texturas más gruesas y muchas veces con distintas decoraciones, que son utilizados especialmente para alguna ocasión especial con una tarjeta de invitación o de felicitaciones para un ser querido. También son utilizados por grandes empresas para hacer que sus compañías se distingan de otras con colores específicos acompañados del sello de la industria en uno de los ángulos del sobre.Si bien es cierto que el internet y los avances tecnológicos llegaron para quedarse y hacerle la vida más fácil a cada ser de la tierra, también dejó a un lado los grandes inventos que el hombre realizó en alguna época del año, pero queda muy claro que la invención de los sobres de papel fue el principio de la mensajería que hoy conocemos, y actualmente, muchas personas no han dejado de utilizar los sobres y la correspondencia convencional, pues consideran que esta puede ofrecer mayor privacidad que el internet.